Por ese par con secretos 25/11/1989.



En estos últimos días, debido a una discusión encarnizada con mi Amor, que siempre comienza por una pavada; pero a medida desenfundamos viejas facturas y lanzamos sentencias en caliente, típico en una pelea de enemigos íntimos, quedó en modo suspensión toda palabra de cariño entre nosotros. Es un clima agrio e imposible describir con palabras, porque cuando Yanet se pone en pose de guerra, es en su totalidad atemorizante; es verbal, gestual y acción acelerada en todos sus movimientos!. Un pequeño roce involuntario causado por el escaso espacio en nuestro hogar comprimido por cinco ocupantes, reacciona con gestos similares a levantar escudo y pesada espada de metro y medio!.
_Me golpeaste el brazo?.
_Fue sin querer Negra, no te vi venir!.
_No me provoques, si querés terminar bien el día!.
Aunque suene amenaza violenta, sé que no disparará un golpe; Ella apelará al uso de algo más doloroso que una cachetada, me quitará privilegios sumados a la incertidumbre de no encontrarla en casa cuando regrese de mi trabajo diario!. Eso duele más que una herida abierta, que un golpe con moretones; sabe por dónde y cómo sangro, pues tiene bien medido su valor en mi vida y se aprovecha de eso. Imposible saber cuanto durará su ira, puede ser hasta una semana, o por esas vueltas del destino que necesitando algún favor, con astucia femenina busque provocar e incitar a todas mis hormonas, para lograr arrodillarme a su par de piernas!.
_No es demasiada corta esa pollera?.
_Tengo piernas para mostrar!, que te molesta?, si vos ya ni me miras!.
_Ja!, no te miro por miedo a que me muerdas!.
_Andá!, hace días que ni una caricia me haces!.
Y ahí está mi incertidumbre!; puede ser que determinó un alto el fuego y no me enteré, como también puede que me esté echando Falta Envido ó mandándose a la pesca con un pobre tipo dominado por una mujer, sin piedad por el sexo opuesto!.
A veces, cuando por algún compromiso social (exclusivo para la Señora), quedo solo en casa reparando o construyendo algo, me pongo a meditar sobre nuestra relación matrimonial; hay días que arribo a verdaderas y angustiantes revelaciones: que sería mi vida sin Ella?; sin su cáliz de vida que parió a nuestros tres hijos?; el solo pensar perderla por un exceso, mantiene todos mis bajos instintos bien guardados!. Puedo afrontar miles de incertidumbres, pero perderla por soberbia, machismo o prejuicio, sería mi Armagedón. Sus piernas son mi debilidad, mi Maná caído del cielo, pero cargan muchos secretos; varios de estos los esgrime en extorsión, dejando bien claro que no soy su dueño y debo luchar día a día para merecerlas!. 

Puedo alegar como descargo, que nunca busque meretriz alguna para saciar mis necesidades masculinas; no por cuestiones de discriminación o prejuicios, solo por principios simples: no justifico el sexo sin admiración o deseos puros por mi pareja; tampoco tiene valor alguno mi fidelidad, Ella insiste que le soy fiel tan solo por miedo a pescarme S.I.D.A.; pero de ahí a validar que nunca pagué por sexo?; no, nada es gratis en esta vida!, y por ese par de piernas llenas de secretos, le vendí mi alma al Diablo!. Es más, aplicando la operación matemática: si en los años de relación sentimental sumo todo lo que llevo sacrificado, en tiempo, dinero, sangre, sudor y litros de lágrimas; divido por la cantidad de ocasiones en que acordamos sexo explícito consensuado, arroja como resultado indiscutible: resulté favorecido, con el más caro del mundo!.

Lo que nos toca!. 05/09/2020.


Otro sábado más día 173 de cuarentena estricta, esta vez con expectativas por espectáculo de Hernan Casciari: Streaming con Delivery a las 20:30 horas. Durante la mañana me puse a reacomodar la vieja cocina a gas natural; la probé en todos sus mecheros, anduve olfateando todo el día por el comedor; de esa manera compruebo si no perdí el olfato y existe una pérdida de gas en las nuevas conexiones!.
Luego de almorzar y de mi sagrada siesta reconstructiva, volvimos encarar acomodar el quincho y surgen las primeras chispas:
_Por donde nos conviene empezar a pegar cerámicos en el piso?, y conque tapamos esos pozos que quedaron?.
_Ya te dije que primero hay que hacer una carpeta para emparejarlo y darle la inclinación hacia la puerta!.
_Pero no puedo taparlo con Klaukol mientras voy poniendo los pedazos de cerámicos?.
Es ahí cuando genes vascos sienten que le están tocando el trasero!, se reagrupan simultáneamente en posición de ataque y ruego a todos mis ancestros contenidos en nuestro crisol de razas para que los calmen, antes que impriman movimiento y acción, en alguna de mis extremidades!.
_Ya te dije que es una locura!, te va a quedar más desparejo que el viejo camino de Los Siete Lagos!.
_Pero si Horacito no hizo carpeta en las piezas nuevas!, vos siempre tirando pálidas.
Es imposible discutir con Ella cuando entra en “modo avión”; se que es inútil y tensa demasiado mis coronarias, así que bajo mi “muro de silencio” y sigo con mi ocupación: cambiar esos desgenerados y amorfos picos de gas natural; maldigo al diseñador de la vieja cocina, pero luego de una hora angustiante, logro colocarlos donde corresponde.
Como a las 19 hs, cuando recibo el link de Eventbrite, enciendo la PC y abre la puerta “el increíble amor de mi vida” diciendo:
_Que cenamos esta noche?.
Como no sé si es una tregua en proceso o piensa seguir discutiendo, trato de poner mi mejor postura de tipo calmo y suelto suavemente:
_No sé, querés pedir comida?.
_No, porqué no te haces una sopa paraguaya que te salen tan ricas!.
Trago saliva y me resigno, ya a estas alturas de mi vida no distingo cual es el mal menor!. Si algo sale mal, genera automáticamente una factura a presentar en cada discusión; si sale bien, es un DNU a cumplir por el resto de mi vida.
_Pero no hay mas harina de maíz, el sábado pasado la use toda.
_Uy, me voy a ver si la Mariela todavía está abierto.
Vuelve a la media hora y acusa:
_Ja!, todos los negocios están abiertos; quien dijo que cerraban temprano?.
Sigo pelando cebollas, picando ajo, pimientos, cebolla de verdeo y me acuerdo:
_No hay mas huevos!.
_Ahh, porqué no me dijiste antes; tengo que volver a salir, ya me quería bañar!.
Sale pegando un portazo, como si también fuera mi obligación constatar el stock en nuestras alacenas!.
Ya tengo abierto Youtube y voy mirando de reojo la compu mientras sigo salteando las verduras; llegan los huevos, los mezclo con 400 cm3 de agua purificada, un poco de leche en polvo, sal y dos cucharadas de aceite; lo pongo a remojar, sigo con las verduras, viendo que ya comienza el show, enciendo el horno; es todo algarabía cuando aparece mi caripela en el video que envie para el Streaming, sigo el chat mientras voy controlando el tiempo de horneado. Aparece Casciari literalmente cagandose de frio, nos deleita con sus memorias (solo uno de los cuentos no conocía), sirvo la sopa paraguaya y le entramos como desaforados aun quemándonos con el queso derretido. Al ir enfriándose, voy saboreando la comida y noto el sabor un poco dulce; que raro!, seguí la receta al pie de la letra, no cambié nada y escucho a mi crítico gastronómico oficial:
_No está como algo dulce?.
_Umm si, será otra vez que se confundieron de harina?. Una de las tantas apareció con una muy barata, que no tenia el color amarillento de siempre y resultó incomible.
Seguimos disfrutando de Casciari, luego seguimos con los informes de SDTV, subimos al dormitorio y nos clavamos dos tes de hierbas, un postre de dulce de leche y dos capítulos del narrativo histórico Outlander (que ya lo sigo solo para ver como la terminan) y tipo 2 de la madrugada cuando ya estábamos a los cabezazos, nos acostamos.
En momento, es cuando vuelve a mi retorcido rebobinado mental, similar a un dejavu repasando paso por paso, porque quedó tan dulce la sopa?. Me vuelve la imagen de los preparativos y suelto una carcajada!.
_Ja, ya sé que hice!, le puse azúcar impalpable en lugar de leche en polvo!; que pelotúdo!.
_Con razón cuando lo mezcle no tenía color a leche, pero como vos siempre compras esas leches en oferta de 5ta marca!, pensé que era por eso.
_Ja ja, cuando le cuente a los chicos!, vos el “hombre perfecto”!.
Si, debo afrontar que me estoy poniendo viejo y mas que nunca, cuando me apuro, siempre algo sale mal!; pero también, no soy un hombre de suerte y en posición de liderazgo; si esto le ocurriera a Karlos Arguiñano, seguramente lo presentaría como Sopa Paraguaya agridulce; pero para Paco Achaval es un error imperdonable, de por vida!. También cuento, con la inclaudicable difusión de mis errores por parte de mi grupo familiar, en cada reunión o WhatsApp. Para contar las ganadas, y mi descargo legal, solo me queda mi blogs personal, “Crónicas Terrícolas de Un Marciano”.


Lo que nos toca!. 29/05/2020.

Todo comenzó normal como cualquier día de la semana; la consigna era elaborar fideos caseros con espinaca. Una combinación perfecta de comida sana, sin conservantes y económica, ya que la familia Beltran cuenta con gallinas ponedoras y en forma de trueque nos facilita huevos frescos a cambio de una parte del producto; también fomentamos el cooperativismo familiar, esa rara y antigua actitud nunca valorada, hasta que la perdemos por desidia o apatía a los mayores, que preocupados por la salud de sus hijos, hacen un esfuerzo económico por mantenerlos bien alimentados. A simple vista, es solo herencia cultural de nuestros abuelos, que en su mayoría padeció alguna hambruna en sus vidas, por lo cual todo circula y confluye, en “la buena comida”; pero esencial en el desarrollo de sus futuros, ya está perfectamente demostrado: la niñez desnutrida, no tiene esperanza de vida!.

Así que Yanet estuvo procesando la espinaca con huevo, uniendo ingredientes la noche anterior, pues forma parte del ritual en la vieja receta familiar. Desocupamos la mesa, armé la amasadora, comencé a cortar el bollo en finas rodajas y saltó la primera contraorden:

_No las cortes tan finitas!.

_Por?, después de amasadas tenés que partirla para que no salgan fideos de 50 centímetros!.

_No tiene nada que ver; es más fácil y lleva menos tiempo amasarlas.

No es la primera vez que me toca participar solo como ayudante; ya tengo vedadas por defecto las opiniones culinarias!, cuando en realidad he cocinado casi toda mi vida, leído recetas de libros enormes, escuchado a mi Santa Madre recitar de memoria las mezclas sin medir cantidades de ningún ingrediente; solo por intuición cocinaba!; no se si era el hambre o mi enfermiza adoración por ella, pero igual todo le salía rico. Pero en nuestro contrato matrimonial, seguramente no leí la letra chica, donde seguramente aclaraba sus derechos irrefutables a oficiar de único Chef certificado. Cerré la boca y seguí cortando un poco mas grueso. Corrí al primer punto la amasadora, abocándome al único acto permitido: dar vuelta la manija en sentido horario, mientras ella los extendía y enharinaba sobre la mesa.

Cuando pasamos al segundo punto de amasado, veo que al estar alejado de las partes a procesar, las acerco a mi brazo izquierdo apilándolas más cerca.

_Que hacés?, no ves que pegotean si las apilas.

_Pero si ya les pusiste harina!. Las acerco para no extender tanto el brazo.

_Claro, como no te va a doler el brazo si te la pasas todo el santo día encerrado en tu bunker sin agarrar un poco de aire puro!. Ahí, ya mi instinto de supervivencia tiró la primer alarma; que relación tiene mi dolor en el brazo?.

Pero fue inevitable, siguió una brutal descarga de facturas atrasadas; todas en relación a mi predilección por cuidarme y respetar a rajatabla la cuarentena; no dejaba espacios o silencios para poder defenderme o retrucar sus dichos ofensivos hacia mi persona!. Así comenzó una batalla encarnizada; que siguiendo las normas en la historia universal, de recordar las batallas por supremacía de acuerdo al lugar o hecho que la desencadenó, titule como: “La batalla de los fideos”. Fue una verdadera masacre de egos; cada frase que me pegaba venía con mas decibeles y para poder responder el fuego enemigo le imprimía mas volumen a mis descargos y por reflejo involuntario mas velocidad a la amasadora!. En resumen, amasamos y cortamos dos kilos de fideos caseros en pocos minutos y a los alaridos; salieron muy ricos, aceptables; luego del secado como que se enredaron misteriosamente, pero quedó demostrado entre nosotros la vieja falacia: las recetas hechas con amor, siempre saben mas ricas!.

Así llevamos el día a día, disfrutando las 24 horas juntos; pues a pesar de todo, es lo que nos toca, y podría ser peor!.


Lo que nos toca!. 22/05/2020.

Esta semana comenzó a bajar la temperatura y comienza otra vez el bucle!; donde dormir, que calefactor encender, cual es la estrategia para no congelarnos o petrificarnos al recibir la factura de gas natural!. Gracias al sinceramiento de tarifas del gobierno anterior, toda proyección estructural al edificar nuestro hogar, se fue al tacho de basura; así que ya adaptado a la postura economía de guerra, me pongo a calcular que debemos mudarnos a el dormitorio mas chico, pero con calefactor. Y aquí radica el conflicto con mi Gallega; vos podes elaborar un croquis y calendario aplicando todas las teorías prácticas, experiencias acumuladas durante varios años, datos actualizados de comportamiento globalizado; ella, dedicándole un minuto a tu resumida exposición, solo emitirá un:

_No me gusta!.

_Pero si ni lo pensaste?, porqué no te gusta.

_Porque no soporto ver ese blackout blanco horrible en las ventanas.

_Pero vos le sacaste las cortinas!, yo había dejado el barral puesto?.

_Si, porque tenia que lavarlas, no?.

_Bueno, mañana colocamos las cortinas de nuevo!.

_Ah, pero tengo que esperar a mañana y esta noche?.

Vuelvo a incurrir al viejo ruego: paz cósmica, ven a mí!; pues creo que estas discusiones no merecen ningún análisis psicológico, no hay remedio, no hay cura!.

También viene un poco retorcida, ya que luego de años en litigio, por la habitación al lado del dormitorio en la planta alta; fue su taller en un principio, luego terminó en depósito de actividades postergadas, siguió como taller compartido de costura e informática, con la premisa de constar con TV si o si; al complicarse por tener que subir y bajar varias veces en el día la escalera, quedó solo en mi posesión como taller de informática y depósito de mis herramientas; así que este finde pasado me aboqué a la limpieza. Ella no desocupó totalmente las estanterías, le cuesta renunciar territorio y lo defiende con uñas y dientes, peor que una gata; igual nos llevó varios días, y aun sigo seleccionando que sirve y cual debo descartar por muy viejo!. Además estoy necesitando para mi Home Office, un espacio mas templado para encarar en invierno y esta habitación donde el sol pega durante todo el dia, es la ideal. Una vez mas o menos acomodado, se detiene en la puerta y lanza su declaración de guerra:

_Ah, que te quedo lindo el bulín Achaval!.

_No todo lo que está en las estanterías es mio, Hernandez!.

_Y donde querés que meta todo esto?.

_Claro, yo si tengo que tirar todo lo viejo, vos no!.

_Nada de lo que quedó acá es viejo!.

_Jodeme, ese telar en triangulo para hacer mantitas tiene como 25 años! y es incómodo hasta para guardarlo.

_Vos déjalo ahí, que no te molesta!.

Claro que no me molesta, pero ese artefacto ocupa mucho lugar; igual cuando se pone en pie de guerra, es necesario ahorrar energías; vas a necesitarlas para sobrevivir. Siempre me gustó analizar el comportamiento humano en convivencia, es algo innato que cargo desde joven; debido a mi gran timidez, siempre consideré necesario entender las acciones humanas en todo su contexto; no hay peor resultado que llegar a perder la oportunidad de algo bueno, por no saber reaccionar a tiempo, o con las palabras justas, desencadenando una sucesión de efectos indeseables o hasta violentos; pero con Yanet, no hay patrón posible!, ella ante una misma situación, puede salir disparada en dirección a todos los puntos cardinales y sus variaciones asociativas!. Hasta me llega a confundir, en cual pecado capital está cayendo!; a veces parece “celos”, pero en realidad lo que más le molesta es que no sea para ella los elogios, o sea, es “envidia”!. Cuando alguien, cualquiera sea su sexualidad, se pone a mi favor; vas viendo como se transforma su rostro, como me clava la mirada con ojos de gata al acecho, sumándole una sonrisa burlona y un sonido gutural a bocaquiusa tipo “jú”; lo cual evidencia que estoy perdido, y todo lo que diga en adelante, podrá ser usado en mi contra.

Así llevamos el día a día, disfrutando las 24 horas juntos; pues a pesar de todo, es lo que nos toca, y podría ser peor!.


Lo que nos toca!. 15/05/2020.

Sigue tenso el clima espiritual en mi entorno, o talvez siempre fue igual solo que en cuarentena, la presencia continua en el mismo ámbito nos delata, lo que nunca quise asumir: no estamos hechos el uno para el otro!. No son tiempos para enredarse en deducciones emocionales, a todos nos pesa el oscuro futuro o para algunos simplemente, el final del futuro; por lo cual prefiero asumir que fue obra del cruel destino, o en el peor de los argumentos astrofísicos, un accidente de luz y hormonal. Siguiendo con mi vieja táctica de no enfrentamiento, ya que siempre pierdo, le busco la vuelta para mantener la distancia suficiente para evitar cortocircuitos neuronales; al contar con dos unidades habitacionales separadas en el mismo domicilio, voy alternando los distintos climas; cumpliendo con mi horario laboral home office, me da posibilidad de desayunar, tomar medicamentos, escuchar mi música preferida según el ánimo, en perfecta armonía, pero solo!. Luego de unas pocas horas en ideal entorno: trabajo, esparcimiento, comodidad, sonidos controlados; llega el cambio brusco.
_Ay, se me hizo tarde!, porqué no me despertaste con vos?.
_Si te llamé!, te diste vuelta y dijiste, ya me levanto!.
_Ah, pero si vos sabes que me cuesta levantarme!, porqué no me sacudiste?.
_No sé!, para que no me putees.
_Andá a cagar, cuando te puteo, es con razón!.
Es cuando se produce un corto silencio, donde presumo que mis neuronas en ardua conectividad, enfrentadas en órdenes de instinto animal, no deciden si impulsar mis músculos corporales para lanzarme sobre su cuello, o un rápido y furioso a los masticatorios para que cierre mi boca hasta que pase el temblor!; y evitar el desencadenamiento del bucle discusión Achaval/Hernandez que nunca tiene final feliz.
Bien entrada la tarde, le recuerdo que tenemos reunión coral por Zoom a las 19 horas y que no repasamos nada la partitura de “La Vieja”; tarea que nos había encomendado el director. Automaticamente se dispara su desesperación instintiva; no se acuerda nada de lo que vimos hace una semana y ya se dio cuenta que por chat, cuando te habilitan el micrófono, no puede hacer mímica, tik tok, o el conocido pescadito; justo en esos momentos estaba abocada a su proyecto tierra/macetas y para no dejar todo a medio terminar, le dio mas velocidad a sus tareas y parecía una hormiga negra acarreando elementos ante un posible diluvio!.
_Ay, a que hora es el ensayo?.
_A las 19 te dije.
_Donde dejaste las partituras?.
_Vos la guardaste!, acordate que me dijiste que yo pierdo todo.
_Ay, pero vos no viste donde las guardé?.
_Seguramente las dejaste arriba el teclado, donde te dije que no apoyes nada!. Obvio que ahí estaban las benditas partituras, cagandose de risa por nosotros!.
Comienza la sesión y como en las viejas clases de secundaria, que estudiábamos en el recreo anterior, ella seguía repasando el audio en otra compu; el director nos pone al tanto de los últimos acontecimientos, nuevos proyectos virtuales y larga la serie de prácticas cuerda por cuerda; nos comenta lo bueno de este forzoso sistema virtual: mientras uno escucha las partes, con el micrófono cerrado, los demás podemos repasar lo nuestro sin molestar!; pero claro, no es nuestro caso en particular; tenemos que conectarnos con un solo dispositivo, de lo contrario se producen acoples molestos, así que no podemos cantar juntos sin molestarnos, algo muy natural en nosotros desde que nos conocemos: aunque estemos en lo mismo, en el mismo lugar, con la misma premisa, con el mismo fin, con el mismo nivel de libido, con igual expectativa, nos molestamos!.
Conecto su celular a el mismo chat y voy hasta el dormitorio; también le molesta, es que nuestro matrimonio, va mas allá de un simple contrato social; es hasta que la muerte nos separe; por lo tanto ruego a quien corresponda: no me separen de ella!.
Así llevamos el día a día, disfrutando las 24 horas juntos; pues a pesar de todo, es lo que nos toca, y podría ser peor!.

Los Vacunáo